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La reciente aparición de modelos de vehículos puramente eléctricos e híbridos en el mercado automovilístico hace necesario plantearse cuáles van a ser las necesidades que surgirán a medio y largo plazo de esta circunstancia para proveer con antelación soluciones a la ciudadanía. En los primeros ocho meses de 2016 se han matriculado en España un total de 19.234 coches híbridos, lo que supone un aumento del 70,7%, la cifra a día de hoy supera ya al total de coches de estas características matriculados en todo 2015. Por otra parte, también crece la venta de coches puramente eléctricos, concretamente se han matriculado 2.727 unidades en lo que llevamos de 2016, habiendo un aumento del 98,2% respecto al año anterior.

 

Esta tendencia al alza es especialmente interesante dado que los coches y motos eléctricos e híbridos representan una oportunidad importante para disminuir notablemente la emisión de gases nocivos para las personas y el medio ambiente, así como, según varios estudios y pruebas, su producción podría ser más respetuosa con el medioambiente que la de los coches convencionales. Otras ventajas son que no emiten calor, su nivel de ruido es considerablemente inferior y sus vibraciones son casi imperceptibles; por ende, disminuyendo la contaminación acústica, tan perjudicial para la salud de personas y animales. Los coches ecológicos con mayor penetración son los híbridos que combinan motor eléctrico y de gasolina, pero desde el punto de vista ambiental son más interesantes los híbridos “enchufables” porque pueden circular hasta 40 kilómetros sólo con la batería y ésta puede recargarse directamente de la corriente.

 

Estudios como el de Samaras[1] afirma que los automóviles híbridos conectables a la red eléctrica reducen un 32% las emisiones de gases de invernadero en comparación con los vehículos convencionales, pero que esta reducción sería menor si la comparamos con híbridos “no enchufables”. La mejora que suponen los vehículos híbridos en lo que se refiere a emisiones de gases de invernadero es también apoyada por el trabajo de Mohamadabadi[2].

 

En lo que la mayoría de expertos coinciden ampliamente es en la imperiosa necesidad de que la producción de estos vehículos y la recolección de la energía eléctrica que requerirán para su funcionamiento provenga de fuentes limpias y renovables, así como es crucial optimizar y potenciar el correcto tratamiento y reciclaje de sus baterías una vez acabado el ciclo de vida del producto. Si logramos esto, conseguiremos una reducción notable en la emisión de gases nocivos tanto para el medio ambiente, como para los seres humanos y animales.

 

Por otra parte, la falta de infraestructuras de abastecimiento en garajes comunitarios como en la vía pública, es una de las barreras más importantes que impiden un auge más rápido para la compra de este tipo de vehículos.

 

Los vehículos puramente eléctricos, fundamentalmente urbanos, o los híbridos “enchufables” actuales o de próxima aparición, requieren que los edificios y espacios públicos estén dotados de las infraestructuras adecuadas para cubrir las necesidades de estos nuevos vehículos, especialmente la recarga de la energía eléctrica que necesitan para su funcionamiento. Esto se realizará principalmente en las plazas de garajes residenciales y puntualmente en los sitios habilitados en la propia vía pública o centros de trabajo, por lo que, es imprescindible la planificación y bonificación de las instituciones para favorecer la creación y adecuación de este tipo de infraestructuras.

 

Los vehículos híbridos y puramente eléctricos, como ya sabemos, son una realidad y su desarrollo será imparable en los próximos años, y más si tenemos en cuenta los siguientes detalles. Por una parte, el ahorro es evidente, pues estamos hablando de un consumo medio de 1,50 euros de energía eléctrica por cada 100 kilómetros recorridos aproximadamente, frente a un promedio de 10 euros de combustible por esa misma distancia. Por otro lado, algunas firmas automovilísticas están empezando a establecer la venta del vehículo sin la batería (que es la parte más cara), ofreciendo la posibilidad de obtenerla por modalidad de “renting” (alquilando la batería), con lo cual se abarata considerablemente el costo, llevándonos hasta precios de venta competitivos, incentivando de esta forma la compra de vehículos eléctricos por un gran segmento de la población.

La previsible mejora tecnológica de las baterías, acople de vehículos a la red, mayor eficiencia de los motores eléctricos, métodos de fabricación más ecológicos, etc … conseguirá que los vehículos puramente eléctricos e híbridos reduzcan las emisiones de efecto invernadero y logren también una notable mejora en cuanto a eficiencia energética. Mejora que será mayor si logramos que esta energía provenga de fuentes limpias, renovables y ecológicas.

Para lograr lo anteriormente expuesto es necesario que desde este Ayuntamiento se comience a planificar e incentivar la instalación de puntos de recarga en los garajes de las viviendas, al igual, que en las instalaciones de los aparcamientos públicos de nuestra ciudad. Con esta moción, el Grupo Municipal de Ciudadanos pretende que se tenga en cuenta estas circunstancias evitando posibles problemas a medio plazo. Todo ello nos obliga a contemplar esta cuestión de forma similar a la normativa actual de los servicios de telecomunicaciones, número de plazas de aparcamiento por viviendas o más recientemente el de la eficiencia energética de las viviendas.

 

 

Por todos estos motivos, el Grupo Municipal de Ciudadanos (C´s) propone en el pleno del Ayuntamiento de Granollers la adopción de los siguientes ACUERDOS:

 


PRIMERO
:       Que se estudie la posibilidad de bonificar o incentivar en toda nueva construcción de inmuebles la adecuación de las infraestructuras básicas necesarias (canalizaciones, etc.) que posibiliten la recarga de las baterías de los vehículos puramente eléctricos e híbridos en los garajes comunitarios.

 

SEGUNDO:      Que se estudie definir una partida presupuestaria para incentivar la adecuación de aquellos edificios no dotados de estas infraestructuras, dando facilidades para la instalación de las mismas a aquellas comunidades de vecinos que así lo soliciten.

TERCERO:       Que se inicien los estudios necesarios para dotar a los aparcamientos públicos de la ciudad con puntos de recarga para los vehículos eléctricos e híbridos, comprometiéndose a un mínimo número de tres por cada cien plazas.

CUARTO:        Que se inicien los estudios necesarios para generalizar la instalación de puntos de recarga en los edificios, equipamientos e instalaciones municipales que lo requieran.

QUINTO:         Que todos estos estudios vengan acompañados de su correspondiente análisis no sólo económico, sino también medioambiental, evaluándose las externalidades positivas tales como reducción de ruidos, reducción de gases de efecto invernadero (CO2) y toneladas equivalentes de petróleo (tep) que se dejarían de consumir.

SEXTO:            Que se modifique la ordenanza municipal reguladora de aparcamientos de vehículos de tracción mecánica en las vías públicas municipales reguladas por control horario mediante máquina expendedora de tíquets, para implementar medidas de discriminación positiva a favor de los vehículos más respetuosos con el medio ambiente. De tal forma que los vehículos que reciban de la DGT el distintivo ambiental que acredite a su vehículo como de “Cero Emisiones” (eléctricos), no paguen el estacionamiento en zonas azules y verdes; así como, los que reciban el distintivo de “Eco” (híbridos, gas natural, gas licuado y biogás) tengan una bonificación del 50%. Medidas que ya se están estudiando o implementando en otros municipios españoles, como por ejemplo Barcelona, Madrid, Salamanca, Pamplona o Málaga.

SEPTIMO:    Que se estudie la modificación de las bonificaciones en el Impuesto sobre Vehículos de Tracción Mecánica. De tal forma que los vehículos híbridos tengan una bonificación del 75% durante los seis primeros años; que los vehículos eléctricos tengan una bonificación del 75% durante los primeros siete años (que actualmente está en el 75% los dos primeros años y en el 25% los tres años siguientes); que los vehículos de gas natural o licuado tengan una bonificación del 75% durante los cuatro primeros años y del 25% para el quinto. Son medidas similares a las que ya se están poniendo en marcha o estudiando su implementación en otros municipios españoles.

OCTAVO:     Que este Ayuntamiento en la medida de lo posible siga actualizando su parque móvil, sustituyendo los actuales vehículos por nuevos que sean eléctricos o híbridos.

 

Granollers, a 19 de septiembre de 2016

 

 

[1] Samaras, C., Meisterling, K. Life cycle assessment of greenhouse gas emissions from plug-in hybrid vehicles: Implications for policy (2008) Environmental Science and Technology, 42 (9), pp. 3170-3176.

[2] Safaei Mohamadabadi, H., Tichkowsky, G., Kumar, A. Development of a multi-criteria assessment model for ranking of renewable and non-renewable transportation fuel vehicles (2009) Energy, 34 (1), pp. 112-125.