LA IMPOSICIÓN DE LA “DESCONEXIÓN”
La imposición del independentismo está presente diariamente en nuestras vidas.
Un fiel ejemplo de ello son las banderas talla XXL que adornan las calles (e incluso el balcón) de muchos de nuestros ayuntamientos, especialmente durante la fiesta mayor del municipio. Fiestas que, en lugar de ser un motivo de unión, fraternidad y celebración de todos los ciudadanos, se convierten en patrimonio reivindicativo de una parte de la población.
Y para que el forastero (o foráneo) no tenga ninguna duda del nivel de compromiso del pueblo en cuestión o del activismo de la ANC en la localidad, no pueden faltar los murales al más puro estilo Úlster o la previsible estelada a la entrada del municipio, siendo ésta cuanto más grande, mejor.
Si eres funcionario y no estás a favor de la independencia, toma doble ración de presión. Si hay que desobedecer (a lo que a ellos les convenga), se desobedece que para eso están los funcionarios, para cumplir las órdenes sin tener en cuenta las leyes. “Nosotros sólo cumplíamos órdenes”, frase muy recurrida en la historia, vinculada a hechos casi siempre ignominiosos y reprobables.
La universidad les pertenece. Ellos boicotean y agreden, en nombre de la “justicia y la libertad”, a todo aquel que a sus aulas va a realizar una conferencia o a transmitir un punto de vista distinto al suyo. ¿No son esas actitudes fascistas?
Ya se han apropiado del 11 de septiembre, antaño la Diada de todos, ahora la de ellos, la de los “buenos catalanes”. También fomentan que se denuncie a pequeños comerciantes por utilizar el castellano en sus establecimientos, ignorando que Cataluña es bilingüe.
Lo suyo es una huida hacia adelante lanzando una gran cortina de humo para tapar sus innumerables casos de corrupción, sus vergüenzas. Saben y les duele que, por ejemplo los Pujol, sean de la misma calaña que los Rato o Bárcenas de Madrid. Saben que el “Espanya ens roba” simplemente ya no cuela.
Tras 100 días de Puigdemont en el gobierno, es cierto que la desconexión continúa pero, de la realidad.